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Trabajar con medicamentos y tu farmacia 

Algunos adolescentes y adultos jóvenes deben tomar medicamentos para manejar problemas de salud a corto o largo plazo. Ya sea que uses analgésicos para dolores de cabeza ocasionales, un inhalador para ataques de asma o una receta para un problema crónico, es importante tener en cuenta los métodos adecuados para usar y almacenar medicamentos. El manejo inapropiado de los medicamentos puede resultar en medicamentos que pierdan su eficacia, afecten negativamente tu salud y/o que lleguen a las manos equivocadas y dañen la salud de otra persona.

Los farmacéuticos son un recurso valioso para los pacientes de muchas maneras. Los farmacéuticos conocen muy bien sobre los productos con receta y de venta libre y son capaces de ayudar con cualquier pregunta o inquietud sobre medicamentos. Los farmacéuticos trabajan en estrecha colaboración con tu proveedor para brindarte orientación profesional sobre tu salud.

Utiliza los siguientes consejos para asegurarte de que estás cuidando de manera responsable los medicamentos que actualmente posees o tomas:

  • Mantén los medicamentos lejos del alcance de los niños – Si viven niños pequeños en el mismo hogar, almacena los medicamentos en recipientes a prueba de niños y fuera de su alcance.
  • Etiqueta tus medicamentos – Todos los medicamentos deben etiquetarse claramente y dejarse en recipientes originales.
  • Termínate y usa SOLAMENTE lo que se te recetó – No des ni tomes medicamentos que fueron recetados para otras personas. Esto es importante. Esto no sólo puede ser peligroso, sino que dificulta al proveedor diagnosticar con precisión un problema de salud parcial o inapropiadamente tratado.
  • Lee la información de seguridad y dosis – Al tomar o dar medicamentos, lee la etiqueta y mide las dosis cuidadosamente. Asegúrate de que el medicamento no haya caducado y de conocer los efectos secundarios del medicamento que estás tomando. Si un efecto secundario en un medicamento es somnolencia, mantente alejado de actividades como conducir y otras actividades que podrían afectar tu seguridad y la de los demás.
  • Desecha los medicamentos correctamente: desecha los medicamentos obsoletos mezclando medicamentos con tierra, arena para gatos o café molido usado. Coloca la mezcla en un recipiente, como una bolsa de plástico sellada, y ponla en la basura.

Un farmacéutico es tu mejor punto de contacto para obtener asesoramiento sobre cómo tomar tus medicamentos, responder a cualquier pregunta sobre medicamentos particulares que te receten y para asegurarse de que todos tus medicamentos funcionen bien juntos.  Hay muchas ventajas de hablar con tu farmacéutico.

  • ¿Hay algún problema con el costo? Si tienes un problema con el precio del medicamento, tu farmacéutico puede sugerir alternativas a tu médico o conocer otros programas de ahorro de costos, incluyendo asistencia de copago o programas de asistencia al paciente.
  • Asesoramiento de medicamentos/Responder preguntas: Cuando recoges una receta (especialmente una nueva receta) de la farmacia, puedes esperar tener una conversación con el farmacéutico, ya que esto es requerido por la ley estatal. El propósito del farmacéutico al hablar contigo es asegurarse de que sabes cómo tomar el medicamento, para qué se utiliza el medicamento, cualquier posible efecto secundario (o cómo evitarlos) así como artículos adicionales exclusivos del medicamento y tu salud.  Si no entiendes las instrucciones sobre cómo tomar los medicamentos, ¡pregúntale a tu farmacéutico! Pueden ayudar a explicar las instrucciones y dar consejos sobre cómo mantenerte organizado, como establecer un horario o llenar un pastillero.
  • Conexión con tu proveedor médico: Si hay un problema con tu receta, tu farmacéutico puede ponerse en contacto con tu proveedor médico directamente y hacerle saber lo que se necesita para poder darte tu medicamento.
  • Hablar contigo acerca de la seguridad de los medicamentos: Tu farmacéutico puede dar consejos importantes sobre qué medicamentos de venta libre, como analgésicos y suplementos dietéticos, son seguros de usar en combinación con los medicamentos que te recetaron.
  • Monitorear problemas de salud: Tu farmacéutico puede ayudarte a manejar tus enfermedades. Por ejemplo, si te toman tu presión arterial o glucosa en la farmacia, puedes compartir esos números con tu farmacéutico. Tu farmacéutico puede hablar contigo sobre tu riesgo de presión arterial alta o diabetes, darte sugerencias sobre cómo controlarla o recomendarte atención médica. Si decides dejar de fumar, tu farmacéutico puede tener productos de venta libre para ayudarte durante este proceso.
  • Ayudarte a manejar otras enfermedades: Los farmacéuticos pueden aplicar vacunas, como la vacuna anual contra la gripe y la vacuna contra el herpes zóster. Tu farmacéutico puede enseñarte cómo utilizar equipos de salud como monitores de glucosa en sangre e inhaladores si estos son necesarios para tu cuidado.

Algunos consejos sobre cómo puedo comunicarme con mi farmacéutico son:

  • Cuando recibas una nueva tarjeta de seguro médico por correo, asegúrate de llevar la nueva tarjeta la próxima vez que vayas a la farmacia para actualizar la información de tu seguro. Esto también aplica para el consultorio de tu proveedor médico.
  • Si tu proveedor médico envía tu receta a la farmacia electrónicamente, llama a la farmacia para verificar si la han recibido y determinar cuál será tu copago y cuándo estará lista para recoger antes de ir a la farmacia. Esto ayudará a evitar retrasos y frustraciones.
  • Lleva un registro de los medicamentos que tomas y dáselo a tu farmacéutico. Incluye todos los productos recetados y de venta libre, incluyendo vitaminas, hierbas y otros suplementos. Tu farmacéutico lo utilizará para mantener tus registros actualizados y ayudarte a tomar los medicamentos de forma segura.
  • Informa a tu farmacia si has tenido alguna reacción alérgica o problemas con medicamentos. Estos problemas se anotarán en tu tabla y se asegurarán de que en el futuro no te den medicamentos que puedan dañarte.
  • Hazle saber a su farmacéutico cualquier cosa que pueda afectar tu uso del medicamento, como si tienes problemas para tragar píldoras, tienes dificultades para leer las etiquetas o problemas para recordar tomar tus medicamentos.

¿Qué preguntas hago?

  • Si surtes una nueva receta
    • Es la primera vez que tomo este medicamento. ¿Qué puedo esperar/Qué debo saber?
    • ¿Cuál es el nombre de mi medicamento?
    • ¿Con qué frecuencia debo tomar este medicamento? ¿Hay una hora particular del día? ¿Qué debo hacer si me salto una dosis?
    • ¿Qué efectos secundarios debo observar? ¿Qué debo hacer si noto algún efecto secundario?
    • ¿Existen otras recetas, de venta libre, o medicamentos genéricos que podría tomar en su lugar?
  • Si está tomando varios medicamentos
    • Actualmente estoy tomando múltiples medicamentos. ¿Puedo hablar con alguien para aprender cómo puedo manejarlos mejor juntos?

En Legacy, los farmacéuticos especialmente capacitados pueden abordar rápidamente tus necesidades de medicamentos, ayudar a coordinar el cuidado, proporcionar educación y mejorar tu acceso al cuidado.   Obtén más información sobre Legacy Pharmacy aquí.

  • Cuando recibas una nueva tarjeta de seguro médico por correo, asegúrate de llevar la nueva tarjeta la próxima vez que vayas a la farmacia para actualizar la información de tu seguro. Esto también aplica para el consultorio de tu proveedor médico.
  • Si tu proveedor médico envía tu receta a la farmacia electrónicamente, llama a la farmacia para verificar si la han recibido y determinar cuál será tu copago y cuándo estará lista para recoger antes de ir a la farmacia. Esto ayudará a evitar retrasos y frustraciones.
  • Lleva un registro de los medicamentos que tomas y dáselo a tu farmacéutico. Incluye todos los productos recetados y de venta libre, incluyendo vitaminas, hierbas y otros suplementos. Tu farmacéutico lo utilizará para mantener tus registros actualizados y ayudarte a tomar los medicamentos de forma segura.
  • Informa a tu farmacia si has tenido alguna reacción alérgica o problemas con medicamentos. Estos problemas se anotarán en tu tabla y se asegurarán de que en el futuro no te den medicamentos que puedan dañarte.
  • Hazle saber a su farmacéutico cualquier cosa que pueda afectar tu uso del medicamento, como si tienes problemas para tragar píldoras, tienes dificultades para leer las etiquetas o problemas para recordar tomar tus medicamentos.

¿Qué preguntas hago?

  • Si surtes una nueva receta
    • Es la primera vez que tomo este medicamento. ¿Qué puedo esperar/Qué debo saber?
    • ¿Cuál es el nombre de mi medicamento?
    • ¿Con qué frecuencia debo tomar este medicamento? ¿Hay una hora particular del día? ¿Qué debo hacer si me salto una dosis?
    • ¿Qué efectos secundarios debo observar? ¿Qué debo hacer si noto algún efecto secundario?
    • ¿Existen otras recetas, de venta libre, o medicamentos genéricos que podría tomar en su lugar?
  • Si está tomando varios medicamentos
    • Actualmente estoy tomando múltiples medicamentos. ¿Puedo hablar con alguien para aprender cómo puedo manejarlos mejor juntos?

En Legacy, los farmacéuticos especialmente capacitados pueden abordar rápidamente tus necesidades de medicamentos, ayudar a coordinar el cuidado, proporcionar educación y mejorar tu acceso al cuidado.   Obtén más información sobre Legacy Pharmacy aquí.